Blame It on Rio, Stanley Donen, 1984, EEUU, Michael Caine, Joseph Bologna, Valerie Harper.
Vapuleada por la crítica norteamericana, la despedida de la gran pantalla de Stanley Donen, realizador recordado y reconocido especialmente por sus musicales (Cantando Bajo La Lluvia, Un Día en Nueva York) pero también por sus comedias (Charada), sí obtuvo un pequeño éxito comercial. Es posible que el tema escogido y su desarrollo, poblado con un relativamente alto contenido sexual, escandalizara a la puritana sociedad americana; en este sentido, se incluye una escena con un desnudo frontal protagonizado por la voluptuosa Michelle Johnson, actriz que ha seguido una irregular trayectoria en producciones de Serie B y en la TV. La sospechosa influencia de la temática en la hostil recepción del filme de Donen en su país se corrobora con la igualmente fría acogida que tuvo la película francesa de Claude Berri en la que se basa, producida pocos años antes.
El tema propuesto como base del enredo que origina las situaciones más o menos divertidas de esta comedia quizá sea demasiado serio para tratarlo en clave de farsa pero es innegable el saber hacer de Donen que eleva la calidad del endeble guión, co-escrito por Larry Gelbart y Charlie Peters, con su sentido de la comedia clásica americana. Antes de la forzada conclusión -aunque interesante ya que plantea posibilidades maduras de perdón- la película desgrana momentos graciosos servidos mayormente por la dupla protagonista Caine-Bologna que componen sus personajes con acierto.
La última película de Stanley Donen se maneja en un terreno por el que el director tiene gusto y dominio y añade un perfil "ochentero" con los desnudos que aparecen a lo largo del metraje, a los que la localización en Río de Janeiro les sirve de pretexto ideal. Pese a no ser una excelente comedia y tener algunos defectos como las, en ocasiones, forzadas reacciones de los personajes que imponen resoluciones artificiales o el enrevesado y precipitado final, Lío en Río consigue entretener a través de la creación de algunas situaciones graciosas por las que vale la pena acercarse a ella. La dirección escogida en este filme es explorar la vis cómica y no ahondar en las consecuencias del suceso, por ello se destacan, sin profundizar en otros aspectos, el tono alegre y divertido de las situaciones que se desenvuelven bajo el colorido manto de la urbe brasileña aunque la gravedad del objeto tratado que se mece en las turbias aguas del adulterio, agravado con relaciones de amistad y sujetos pre-adultos, pueda herir las sensibilidades de algunos o hacer que nos enfrentemos a la película desde posiciones alejadas de la comedia. Donen se retira del cine con una propuesta en tono de comedia ligera pero que resulta amena.
No creo, en contra de lo que dices, que el tema tocado resulte demasiado serio para un tratamiento en clave de farsa. En realidad, considero que la "seriedad" la impone más la calidad del guión y la puesta en escena que el tema elegido por grave que pudiera parecer sobre el papel. Ahí tienes un par de claros ejemplos al respecto como son "SER O NO SER" de Lubitsch y "BÉSAME, TONTO" de Billy Wilder.
ResponderEliminarPero centrándonos en "LÍO EN RÍO", se trata de una comedia de enredo, ágil, elegante y divertida que no alcanza, sin embargo, el grado de fascinación y brillantez que antaño demostró Donen en este género. Cuando la rodó, eran otros tiempos y las modas se imponían a las virtudes. No obstante, esta cinta contiene las suficientes para elevarse muy por encima de la media imperante en una época de vacas flacas para el género de la comedia.
A destacar, eso sí, un espléndido Michael Caine. Si el presupuesto les hubiera dado para sustituir a Joseph Bologna por Tony Curtis, la película hubiera ganado algunos enteros.
Un saludo.
Me encanta su irrupción en el blog pero como la discrepancia es positiva y el debate enriquece me mantengo en mi opinión sobre la seriedad del tema tratado en esta película y la explico.En ninguno de los dos ejemplos que citas (me permito el "tuteo") uno de los vértices de la relación sentimental está cercano a ser menor de edad ,en cambio,en el film de Donen,el personaje de Michelle Johnson sí es muy joven con lo cual se avanza un pasito más allá del "simple" adulterio;esto,creo,puede ser entendido como un asunto más grave,en especial,para los sectores más conservadores de la sociedad pero también para posiciones más progresistas.Es evidente que el personaje en cuestión es una mujer crecidita pero la barrera legal de la mayoría de edad es la que puede escandalizar o agravar más el asunto extramarital y herir más sensibilidades.
ResponderEliminarRespecto al otro punto de divergencia,decir que rompo una lanza por la interpretación que hace Bolgna de su personaje que me parece más que correcta.
Por contra,coincido contigo en la valoración de esta película como obra menor pero por encima de la media en la que se movía el género a mediados de los ochenta.
Espero que sigas contribuyendo con tus interesantes comentarios en el blog.
Un saludo.
Bueno, cuando discrepaba contigo no quería circunscribirme al mero tema del adulterio con el "agravante" de diferencia de edad. Para poner el acento en eso ya estaba el atribulado personaje de Caine pasándolo fatal con la situación creada.
ResponderEliminarQuería referirme a que los dos films citados por mí abordaban temas y contextos mucho más graves (también con adulterio incluido) en clave de comedia de enredo. En el de Lubitsch, la invasión de Polonia por el ejército nazi y la ridiculización del monstruoso personaje de Hitler (la peli se rodó cuando éste era el dueño de Europa!) y en la Wilder se ataca con naturalidad no exenta de mala uva, el sistema de valores y las convicciones de una sociedad hipócrita y bienpensante (demostraba que una puta podía ser una perfecta esposa por una noche, y a la inversa, sin que se derrumbara el andamiaje de esa misma sociedad que lo condenaría en público).
Ya habrá ocasión de seguir comentando cosas.
Mientras, un saludo.
Si,estamos de acuerdo en que el género de la comedia puede abordar temas de gravedad,de hecho,lo hace continuamente pero lo que yo quiero reseñar al comentar Lío en Río es la existencia de temáticas que por su emocionalidad pueden no ser digeridas por (amplios) sectores de la población.Un ejemplo meridiano y actual sería el caso judicial de Marta del Castillo cuyo fallo,probablemente,acabe revisando el sistema punitivo de nuestro país.Es decir,para acercarse con humor a determinados temas que apelan a la sensibilidad emocional,como pudiera ser la relación expuesta por Donen,hay que hilar muy fino y hacerlo con extrema precaución.
ResponderEliminarClaro que podremos ir comentando esta y más cosas,sea en este blog o en el tuyo por el que me he dado un paseo y corrobora tu "cine-adicción" apuntada en los comentarios que has aportado aquí.
Saludos.
Vale la pena resaltar la aparición en la cinta de la entonces jovencita DEMI MOORE...Lo demás es lo demás...👍
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